Se inicia la Tertulia con el tema “¿El Fin de la Infancia Protegida?”. De
todas las aportaciones realizadas las que parecen más interesantes son:
1ª Según el
historiador Philipe Ariès, autor El niño y la vida familiar en el antiguo
régimen, entiende que el “descubrimiento de la infancia” tuvo lugar en la era
moderna. En la Roma clásica y en la iconografía medieval, los niños son
representados como hombres pequeños.
2ª No se
conocen apenas referencias a las actividades propias de la infancia, como el
juego. Se defendía que los chiquillos entraran cuanto antes en el mundo adulto
con el argumento de que todos debemos introducirnos, tarde o temprano, en la
competitividad y la hipocresía de la madurez.
3ª A finales
del siglo XX parecía que en muchas zonas del planeta se afianzaba la concepción
de infancia protegida. Pero en la última década parece que las tornas vuelven a
cambiar hacia una concepción de infancia expuesta. Las consecuencias no se
observan sólo en los programas de televisión.
4ª El
sistema económico dominante exige unos currículos académicos con una mayor
cantidad de conocimientos en edades cada vez más tempranas, y se evalúa a los
niños antes de que hayan asimilado el concepto de examen. Eso sí, a partir de
los cuarenta años de edad lo más probable es que ya no interese como empleado a
la Empresa.
5ª Los
mismos padres, agobiados por su propia relación socio-laboral, transmiten
permanentemente ese agobio a los hijos, cargándoles de una responsabilidad
orientada a alcanzar una meta que en muchos casos termina siendo inalcanzable.
6ª Khalil
Gibran es un maravilloso poeta, místico y artista que nació en Líbano en 1883.
Él nos hace la siguiente reflexión:
Y una mujer
que sostenía un bebé contra su pecho dijo, Háblanos de los Hijos.
Y él contestó:
Vuestros hijos no son vuestros hijos.
Ellos son los hijos y las hijas de la Vida que
trata de llenarse a si misma
Ellos vienen a través de vosotros pero no de
vosotros.
Y aunque ellos están con vosotros no os
pertenecen.
Les podéis
dar vuestro amor, pero no vuestros pensamientos.
Porque ellos tienen sus propios pensamientos.
Podéis dar habitáculo a sus cuerpos pero no a
sus almas,
Pues sus almas habitan en la casa del mañana,
la cual no se puede visitar, ni tan siquiera en los sueños.
Podéis anhelar ser como ellos, pero no luchéis
para hacerlos como sois vosotros.
Porque la vida no marcha hacia atrás y no se
mueve con el ayer.
Vosotros
sois los arcos con los que vuestros hijos, como flechas vivientes son lanzados
a la Vida.
El Gran Arquero ve la diana en el camino del
infinito, y la dobla con su poder y sus flechas pueden ir rápidas y lejos.
Haced que la forma en que dobléis el arco en
vuestras manos sea para alegría.
El también, además a amar la flecha que vuela,
ama el arco que es estable.
7ª Si la
infancia deja de existir, se acabarán la creatividad y la imaginación,
dejaremos de pensar “fuera del marco”. Y el mundo se repetirá a sí mismo una y
otra vez, con todos sus defectos.
Mi infancia es el reflejo,
De aquel viejo
colegio
Donde a leer aprendí.
Como recuerdo los
juegos,
En aquel patio
polvoriento,
Que me hicieron feliz.
Como me acuerdo
De aquel viejo maestro,
Que daba sabios consejos
De los que alguno aprendí.
Como recuerdo
Aquellos chistes graciosos
Que contábamos en el recreo
Y que me hacían reír.
Mi infancia es el recuerdo
De aquellos largos paseos
Viendo florecer los almendros,
Aquellas tardes de abril.
Como conservo el recuerdo
De aquellos partidos playeros
Con los amigos del colegio.
Con aquellos compañeros,
Como pegábamos patadas
A aquella pelota mojada,
Correteando por la playa
Aquellas tardes de invierno.
Aquella infancia dorada,
Aquel espíritu infantil,
Todo aquello que viví,
Será una imagen marcada,
Marcada dentro de mí.
José Manuel Monge