Se inicia la Tertulia con el tema “El Lobo Ibérico, ¿especie protegida, si o
no?”. Destacando de entre todas, las siguientes aportaciones:
1ª El lobo
ibérico (Canis lupus signatus) es una subespecie de lobo (Canis lupus) endémica
de la península ibérica.
Alcanza un
tamaño medio, algo más pequeño que otros lobos europeos. En movimiento llama la
atención el poderío de los cuartos delanteros en relación a la grupa, levemente
caída. Signatus en latín significa ‘signado’ o ‘marcado’. Los lobeznos al nacer
presentan tonos oscuros uniformes.
2ª El lobo
es un carnívoro depredador. La mayor parte de su dieta está compuesta por
presas cazadas, aunque ocasionalmente puede competir con aves carroñeras por
los restos de animales que han muerto de forma natural o por accidente, así
como por restos provenientes de vertederos cercanos a núcleos de población
humana.
3ª El doctor
Félix Rodríguez de la Fuente realizó estudios para concretar la dieta del lobo
ibérico en España. Esta podría estar compuesta por: grandes mamíferos (como
jabalíes, corzos, muflones, ciervos...) en un 35 %, ovejas en un 24 %, conejos
en un 14 %, ratones de campo en un 9 %, carroña un 7 %, reptiles y aves en un 5
%, insectos y vegetales un 4 %, y otros carnívoros (como zorros o perros) en un
2 %.
4ª El número
total de ejemplares de Canis lupus signatus que se pueden encontrar en España
varía según las fuentes. El último censo fiable data de 1988, e indicaba la
existencia de 1500 a 2000 individuos. La población puede estimarse en aproximadamente
2800 ejemplares, distribuidos prácticamente en el cuadrante noroccidental de la
Península.
5ª Detectar
su presencia es complicado para los no expertos, pues tanto sus huellas como
sus excrementos, e incluso los daños al ganado, pueden confundirse con los de
perros de gran talla. Su observación en libertad resulta complicada. No
obstante, se pueden oír (y provocar, imitándolos o mediante grabaciones) sus
aullidos.
6ª
"Legalmente el lobo ibérico está ya en peligro de extinción en Andalucía.
La organización Ecologistas en Acción, tal y como ha señalado en nota de
prensa, va a dirigir ahora un escrito al consejero de medio ambiente para que
"de forma inmediata y mediante Orden, proceda a incluir y publicar en
boletín oficial al Lobo Ibérico dentro de la categoría "En Peligro"
tal y como establece la propia norma para estos casos".
7ª La Orden
sería, por tanto, el siguiente paso administrativo para que se cumpla la ley y
el lobo ibérico quede correctamente catalogado. Como señalan los propios ecologistas,
el nuevo estado de amenaza supone la puesta en marcha de un plan de recuperación, "que incluya
garantías técnicas, jurídicas y económicas" para la especie. En caso de
que dicho plan no se ejecute, Ecologistas en Acción amenaza con llevar el caso
a los tribunales.
8ª El grupo Podemos presentó recientemente una
proposición no de ley para instar al Gobierno a que lleve a cabo una serie de
medidas a fin de proteger al lobo ibérico, garantizar la viabilidad de las
poblaciones de esta especie en la península en el presente y futuro, y trabajar
en la compatibilidad de la conservación del lobo y de las actividades
ganaderas.
9ª También
se propone favorecer la creación de foros de encuentro y debate entre los
sectores interesados en la gestión del lobo ibérico, tales como ecologistas,
ganaderos, científicos y administraciones locales, lo que permitiría elaborar
“una nueva Estrategia Nacional de Conservación del Lobo ibérico consensuada con
todos los sectores implicados”, según recoge la Proposición.
10ª Entre
las asociaciones de agricultores y ganaderos existen discrepancias sobre la
conveniencia o no de aplicar la ley d eprotección del lobo. Mientras la
organización ganadera Asaja Salamanca pidió que dicha provincia fuera declarada
‘zona libre de lobos’, la UPA pide que se aplique la protección pues de esta
manera ante ataques del lobo a sus ganados aquellos podrían cobrar las
subvenciones establecidas sin necesidad de recurrir a seguros privados.
11ª Estas
contradicciones surgen igualmente en el Gobierno de la Nación. Ecologistas en
Acción exige a la Ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente,
Isabel García Tejerina, que retire ante la Comisión Europea su solicitud de
modificación de la Directiva Hábitat, con la que pretende permitir la caza de
lobos ibéricos al sur del Duero.
12ª La
directora general de Desarrollo Rural del Principado de Asturias, Tomasa Arce,
anunció que se va llevar a cabo una batida contra el lobo en terrenos del Parque
Nacional de los Picos de Europa. Las declaraciones llegaban tras diversas
peticiones de colectivos ganaderos asturianos, que no quieren tener lobos cerca
de sus explotaciones y que no aceptan la protección que les concede el Parque
Nacional.
13ª WWF España
ha pedido al ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel
Arias Cañete, que impida las batidas de lobos en los Parques Nacionales, ante
la “evidente falta” de una política de conservación de esta especie basada en
un control científico riguroso e independiente.
14ª Un
equipo de investigadores de la Universidad Estatal de Michigan (EE.UU),
dirigido por Neil Carter, propone abordar la problemática convivencia entre
hombres y depredadores salvajes desde la psicología. Para investigar esto,
Carter se desplazó con su equipo al Parque Nacional de Chitwan, en Nepal, donde
habitan en torno a 125 tigres que viven muy cerca de las poblaciones humanas.
El conflicto en esa zona es inevitable y mucho mayor que el de Asturias: entre
1998 y 2006, 65 personas murieron por ataques de tigres que, además, atacan al
ganado. No es de extrañar por tanto que, pese a estar prohibido, la gente
responda violentamente a estos ataques matando a los tigres.
15ª En su
opinión, las leyes y la persecución policial no son suficientes, pues si la
gente se siente amenazada seguirá matando a estos animales protegidos y
protegerá a los cazadores furtivos. En definitiva, según Carter, para lograr
que los humanos acepten tener depredadores cerca, hay que dejarles claro cuáles
son sus beneficios. De lo contrario, “se habrá perdido la mejor de las
oportunidades para conservar este tipo de fauna”.
16ª Frans de
Waal nos señala que en nuestra prisa por destacar que los animales no son
personas, nos hemos olvidado de que las personas también son animales.
17ª Para
comprender la resistencia a las explicaciones del conocimiento, debo mencionar
a Aristóteles. El gran filósofo colocó a todas las criaturas vivas en una scala
naturae vertical, que baja desde los seres humanos (los más próximos a los
dioses) hasta los moluscos, pasando por los demás mamíferos, las aves, los
peces y los insectos. Hacer comparaciones entre los elementos de esta extensa
escala ha sido siempre un pasatiempo popular entre los científicos, pero lo
único que hemos aprendido es a juzgar a otras especies con arreglo a nuestros
criterios. El objetivo constante ha sido mantener intacta la escala de
Aristóteles, con los humanos en la cima.
El varón que tiene corazón de lis,
alma de querube, lengua celestial,
el mínimo y dulce Francisco de Asís,
está con un rudo y torvo animal,
bestia temerosa, de sangre y de robo,
las fauces de furia, los ojos de mal:
el lobo de Gubbia, el terrible lobo,
rabioso, ha asolado los alrededores;
cruel ha deshecho todos los rebaños;
devoró corderos, devoró pastores,
y son incontables sus muertes y daños.
Fuertes cazadores armados de hierros
fueron destrozados. Los duros colmillos
dieron cuenta de los más bravos perros,
como de cabritos y de corderillos.
Francisco salió:
al lobo buscó
en su madriguera.
Cerca de la cueva encontró a la fiera
enorme, que al verle se lanzó feroz
contra él. Francisco, con su dulce voz,
alzando la mano,
al lobo furioso dijo: ?¡Paz, hermano
lobo! El animal
contempló al varón de tosco sayal;
dejó su aire arisco,
cerró las abiertas fauces agresivas,
y dijo: ?¡Está bien, hermano Francisco!
¡Cómo! ?exclamó el santo?. ¿Es ley que tú vivas
de horror y de muerte?
¿La sangre que vierte
tu hocico diabólico, el duelo y espanto
que esparces, el llanto
de los campesinos, el grito, el dolor
de tanta criatura de Nuestro Señor,
no han de contener tu encono infernal?
¿Vienes del infierno?
¿Te ha infundido acaso su rencor eterno
Luzbel o Belial?
Y el gran lobo, humilde: ?¡Es duro el invierno,
y es horrible el hambre! En el bosque helado
no hallé qué comer; y busqué el ganado,
y en veces comí ganado y pastor.
¿La sangre? Yo vi más de un cazador
sobre su caballo, llevando el azor
al puño; o correr tras el jabalí,
el oso o el ciervo; y a más de uno vi
mancharse de sangre, herir, torturar,
de las roncas trompas al sordo clamor,
a los animales de Nuestro Señor.
Y no era por hambre, que iban a cazar.
Francisco responde: ?En el hombre existe
mala levadura.
Cuando nace viene con pecado. Es triste.
Mas el alma simple de la bestia es pura.
Tú vas a tener
desde hoy qué comer.
Dejarás en paz
rebaños y gente en este país.
¡Que Dios melifique tu ser montaraz!
?Está bien, hermano Francisco de Asís.
?Ante el Señor, que todo ata y desata,
en fe de promesa tiéndeme la pata.
El lobo tendió la pata al hermano
de Asís, que a su vez le alargó la mano.
Fueron a la aldea. La gente veía
y lo que miraba casi no creía.
Tras el religioso iba el lobo fiero,
y, baja la testa, quieto le seguía
como un can de casa, o como un cordero.
Francisco llamó la gente a la plaza
y allí predicó.
Y dijo: ?He aquí una amable caza.
El hermano lobo se viene conmigo;
me juró no ser ya vuestro enemigo,
y no repetir su ataque sangriento.
Vosotros, en cambio, daréis su alimento
a la pobre bestia de Dios. ?¡Así sea!,
contestó la gente toda de la aldea.
Y luego, en señal
de contentamiento,
movió testa y cola el buen animal,
y entró con Francisco de Asís al convento.
*
Algún tiempo estuvo el lobo tranquilo
en el santo asilo.
Sus bastas orejas los salmos oían
y los claros ojos se le humedecían.
Aprendió mil gracias y hacía mil juegos
cuando a la cocina iba con los legos.
Y cuando Francisco su oración hacía,
el lobo las pobres sandalias lamía.
Salía a la calle,
iba por el monte, descendía al valle,
entraba en las casas y le daban algo
de comer. Mirábale como a un manso galgo.
Un día, Francisco se ausentó. Y el lobo
dulce, el lobo manso y bueno, el lobo probo,
desapareció, tornó a la montaña,
y recomenzaron su aullido y su saña.
Otra vez sintióse el temor, la alarma,
entre los vecinos y entre los pastores;
colmaba el espanto los alrededores,
de nada servían el valor y el arma,
pues la bestia fiera
no dio treguas a su furor jamás,
como si tuviera
fuegos de Moloch y de Satanás.
Cuando volvió al pueblo el divino santo,
todos lo buscaron con quejas y llanto,
y con mil querellas dieron testimonio
de lo que sufrían y perdían tanto
por aquel infame lobo del demonio.
Francisco de Asís se puso severo.
Se fue a la montaña
a buscar al falso lobo carnicero.
Y junto a su cueva halló a la alimaña.
?En nombre del Padre del sacro universo,
conjúrote ?dijo?, ¡oh lobo perverso!,
a que me respondas: ¿Por qué has vuelto al mal?
Contesta. Te escucho.
Como en sorda lucha, habló el animal,
la boca espumosa y el ojo fatal:
?Hermano Francisco, no te acerques mucho...
Yo estaba tranquilo allá en el convento;
al pueblo salía,
y si algo me daban estaba contento
y manso comía.
Mas empecé a ver que en todas las casas
estaban la Envidia, la Saña, la Ira,
y en todos los rostros ardían las brasas
de odio, de lujuria, de infamia y mentira.
Hermanos a hermanos hacían la guerra,
perdían los débiles, ganaban los malos,
hembra y macho eran como perro y perra,
y un buen día todos me dieron de palos.
Me vieron humilde, lamía las manos
y los pies. Seguía tus sagradas leyes,
todas las criaturas eran mis hermanos:
los hermanos hombres, los hermanos bueyes,
hermanas estrellas y hermanos gusanos.
Y así, me apalearon y me echaron fuera.
Y su risa fue como un agua hirviente,
y entre mis entrañas revivió la fiera,
y me sentí lobo malo de repente;
mas siempre mejor que esa mala gente.
y recomencé a luchar aquí,
a mi defender y a mi alimentar.
Como el oso hace, como el jabalí,
que para vivir tienen que matar.
Déjame en el monte, déjame en el risco,
déjame existir en mi libertad,
vete a tu convento, hermano Francisco,
sigue tu camino y tu santidad.
El santo de Asís no le dijo nada.
Le miró con una profunda mirada,
y partió con lágrimas y con desconsuelos,
y habló al Dios eterno con su corazón.
El viento del bosque llevó su oración,
que era: Padre nuestro, que estás en los cielos...
RUBEN DARIO